Los áfidos son una de las plagas de insectos más comunes en las plantas de jardines, desde vegetales hasta rosales. Cada especie de áfidos ataca generalmente a la misma familia de plantas, pero pueden coexistir múltiples especies de áfidos en un mismo jardín. Los áfidos se pueden reproducir sin apareamiento, así que sus números pueden aumentar drásticamente en solo unos días. Y también se alimentan en masas densas, lo que les convierte en uno de los insectos devoradores de plantas más destructores.
IDENTIFICACIÓN
SEÑALES / DAÑOS
Los áfidos dañan las plantas al perforarlas con la boca y succionar los jugos de las plantas. Con frecuencia, atacan a las partes jóvenes y tiernas como los tallos suaves y las hojas o capullos nuevos. Las plantas quedan arrugadas, enrolladas y plegadas y con su crecimiento atrofiado. Otra señal de problemas con los áfidos es la presencia de un moho negro como el hollín que se forma en la ligamaza que excretan los áfidos al alimentarse. Los áfidos pueden transmitir virus de una planta a otra.
MALLA PARA PROTECCIÓN EN LA AGRICULTURA CONTRA ÁFIDOS
MALLA ANTIAFIDOS
55×30 (pulg2) ó 22×12 (cm2) | 50×25 (pulg2) ó 20×10 (cm2)
40×25 (pulg2) ó 16×10 (cm2) | 40×40 (pulg2) ó 16×16 (cm2)
Diseñada para controlar la incidencia de enfermedades, siendo un obstáculo físico a los microorganismos portadores de virus. Su construcción estrecha de hilos responde de acuerdo con las diferentes condiciones geográficas y climatológicas, para el control de propagación de plagas al interior de invernaderos y casas